Anoche soñé que volaba. Pero lo hacía a pelo. Sin motor ni alas ni nada que se le pareciera. Yo mismo. Tanto, que hasta iba desnudo.
No lo hacía demasiado alto. Como a la altura de una cometa o algo así. Lo suficiente para poder juguetear, dando giros, subidas y bajadas.
Volaba por encima de las cabezas de la gente. Algunos conocidos. Otros no.
Lo curioso del sueño era que quienes me veían no se asombraban por verme volar. No, por eso no. Se escandalizaban porque lo hacía desnudo.
No lo hacía demasiado alto. Como a la altura de una cometa o algo así. Lo suficiente para poder juguetear, dando giros, subidas y bajadas.
Volaba por encima de las cabezas de la gente. Algunos conocidos. Otros no.
Lo curioso del sueño era que quienes me veían no se asombraban por verme volar. No, por eso no. Se escandalizaban porque lo hacía desnudo.
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