viernes, 24 de diciembre de 2010

renacimientos



Del adoctrinamiento católico de mi infancia me quedaron muchos prejuicios almacenados. Claro que, como todos, aproveché las mudanzas ideológicas para vaciar esos armarios. Una tarea larga y pesada aunque liberadora.

Así y todo, ya lo dice la psicología evolutiva: de lo que se mama de chico, siempre queda algo.

La mayoría de esas ideas no me son de ninguna utilidad en este mundo de depredadores: Amar al prójimo como a uno mismo. Ser siempre pobre para pasar por el hueco de la aguja. La Buenaventurada bondad y el castigo seguro de los malvados... Y más.

De otras, en cambio, me resisto a deslastrarme. Aunque, la verdad, mi relectura poco o nada tienen ya que ver con lo que me habían contado.

Esto de la navidad, por ejemplo, no logra enredarme en la ansiedad consumista. Tampoco en celebrar la llegada de un iluminado que viene a salvarme y acaba dejándose matar para redimir mis pecados. Buf, qué macabro!

En cambio, se me antoja que estos días tienen más que ver con el renacer, con reencontrarse y reinventarse. Con dar oportunidades, a la vida, a los amigos y a los enemigos... A mí mismo.

Recargar el tanque con energía limpia, poner el cuentakilómetros a cero y volver a arrancar.

Tiene que ver con la confianza. En uno mismo y en el resto. En que las piezas van encajando, a su ritmo, con su propio orden, en el momento preciso...

Imperfecto es una cualidad del Pretérito.  Si nos permitimos el renacer, todo lo demás queda por inventar.

Además, casi lo olvido, hay que hacerlo sin convertirse en un iluso. Nunca dije que fuera fácil.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

2011


Si esta navidad, para empezar, en lugar de regalar objetos, obsequiamos algo de nosotros: unas horas de tiempo, una conversación, un rato de escucha o un silencio cómplice…

Si nos despojamos de la dependencia de las cosas y compartimos las imprescindibles: coches, casas, cocinas…

Si ponemos en común las ganas y las ideas…

Si dejamos de vivir en burbujas individuales, unifamiliares...

Si cambiamos el temor al prójimo por sentirnos parte de un todo, tomando conciencia de comunidad, de los recursos de los que disponemos y, de paso, buscamos el modo más racional de compartirlos, repartirlos, conservarlos…

Si admitimos que cada cual evoluciona a su ritmo y hacia donde considera pertinente, puede o se le antoja…

Si abandonamos las frivolidades estéticas y los uniformes, especialmente los ideológicos…

Si usamos las máquinas para lo que necesitamos y nos liberamos de la adicción al último modelo de cualquier cacharro…

Si, por una vez, probamos a comprar/consumir sólo lo que realmente necesitamos...

… entonces, entonces sí que 2011 será un año realmente diferente.


reflejos


Va por Semi !!!

domingo, 19 de diciembre de 2010

jueves, 16 de diciembre de 2010

elásticos


Hay momentos, situaciones, que nos exigen una elasticidad suprema. Ya saben, la rama que se dobla y sobrevive, frente al rudo tronco que cae abatido por el viento. Aquel cuento chino.

No es que lo ponga en duda. Al contrario. Sólo que los elásticos también se enredan, como en el juego de la infancia, entre los dedos. Y, a veces, hasta rebotan golpeándonos la cara.

domingo, 12 de diciembre de 2010

una de piratas


Hay épocas en las que es preciso cruzarse el sombrero de papel, empuñar la espada de cartón y surcar los mares, navegar rumbo al Imperio para, una vez allí, batirse a muerte contra todos sus guardianes hasta, al fin, alcanzar el cofre de los tesoros que durante siglos han expoliado.

Con el botín a bordo, recorreremos el mundo, desfaciendo las injusticias de la historia, financiando la agricultura y la cultura, avalando las industrias sostenibles, posibilitando que cada cual viva como le plazca en su tierra y que viaje sólo quien quiera, dando eco a la imaginación colectiva, aboliendo la dictadura de los mercados y el rodillo ideológico, garantizando el acceso a la salud, educando en la igualdad y la justicia.

Acabada la tarea, bucaneros, de vuelta a casa, a cultivar el huerto de las ilusiones  y  las chifladuras.

Y todo, antes de que suene el timbre, el que pone fin al recreo de nuestros sueños, el que nos vuelve a encerrar en las jaulas de la realidad.

lunes, 6 de diciembre de 2010

papeles


Como las burbujas de aire bajo el agua, los papeles olvidados salen a flote en las mudanzas. Éstos son de cuando las pateras llegaban un día sí y otro también, de los tiempos en que empezaban a chirriar los discursos xenófobos en boca de los apuntaladores de murallas, enladrilladores de orillas, arrasadores de sebadales, hormigoneros de horizontes...

días vacíos


Hay días en que todo retumba y vuelve
expandiéndose en un inmenso vacío
un vacío, por momentos, asfixiante.

Hay días que fluyen solos, por su cuenta,
resistiéndose a todo intento de programación, previsión.
Días que se sacian con una sonrisa, una mueca, un zambullirse en la marea.

Hay días repletos de palabras vacías.
Vocabularios que no bastan para describir un segundo.
Emociones que no caben en ningún acertijo.


sábado, 4 de diciembre de 2010

diversificación


No me gustan los aeropuertos militarizados. Tampoco esos funcionarios millonarios y oportunistas que, presuntamente, defienden derechos con los que el resto de los mortales no podemos ni soñar.


No me preocupan los turistas que se han quedado colgados. La verdad es que ellos no, pero sí l@s trabajadores de los hoteles en los que no dormirán, de los restaurantes en los que no comerán, de los bares en los que no beberán...


Me preocupa que la economía de mi archipiélago siga dependiendo de factores externos tan frágiles y de control tan alejado de las orillas de estas islas. Harto de que la diversificación económica, el fin de los monocultivos, sólo sea un eslogan de campaña electoral.

viernes, 3 de diciembre de 2010

de qué se asombran?


Me resulta encomiable el trabajo realizado por Wikileaks y, en general, por los pocos periodistas coherentes que conozco, ese puñado que sobrevive al margen de las redacciones que encabezan la OJD, que crea medios alternativos, que entrega su vida -y la de sus familias- a uno  y mil proyectos, sin perder la ilusión, la fe.

Dicho esto, debo confesar que poco o nada consigue sorprenderme. Es más, dudo que quedara alguien que no diera por hecho lo que nos están contando estos días.

¿A qué creían entonces que se dedican las embajadas?, ¿a organizar cócteles?

¿Alguien cree que EEUU no presiona para ocultar sus trapos sucios en fiscalías ajenas? Si lo hace hasta el prepotente Marruecos y la UE agacha el rabo.

¿Se sorprende alguien porque vayan tras el director de Wikileaks a cualquier precio, culpándolo de lo que sea con tal de callarlo?

¿Hubo quien se tragó las cifras oficiales de víctimas por las guerras de norteamericanos y sus aliados allende los mares?

¿Qué otra cosa iban a decir de ZP después de que retirara las tropas de Irak y ganara las elecciones aireando el antiamericanismo? Aunque luego, como otras tantas cosas, se lo pasó por el forro de las narices.

¿Quién creyó que Aznar se iba a ir de la Moncloa a su casa, así, sin más, tan calladito?, ¿nadie pilló que el tipo se cree un superhéroe salvapatrias y que está loco por volver? (no entiendo porqué los periódicos difunden todas las chorradas que va diciendo por ahí, en sus viajes con dietas pagadas).

Es como los chanchullos de los políticos. Son tan lamentablemente cotidianos que han dejado de ser noticia. Los periódicos deberían abrir sus ediciones contándonos que alguno tiene las cuentas limpias y transparentes. Eso sí llamaría nuestra atención. Aunque, la verdad, creo que sospecharía y buscaría quién es el propietario del medio que lo cuenta, sus accionistas, las subvenciones que recibe…


Coincidencias???:
Montilla convoca elecciones el fin de semana del Barça-Madrid.
Cuando más presionan los buitres al Gobierno ZP para "salvar" a España de la crisis, El País saca los papeles de Wikileaks.
Al leer estos documentos, todo el mundo mira a la Casa Blanca. Es entonces cuando la NASA anuncia que hay vida en el agua salada.

Me contagiaron la paranoia o aquí hay directores de orquesta. A saber.


cuestión de grados



El 60% del cambio climático lo ha provocado la agricultura ¿Qué porras estamos comiendo?

domingo, 28 de noviembre de 2010

reincidente



Me confieso reincidente y, además, apologista de los delitos de ingenuidad y opinión.

Infrinjo sistemáticamente la norma básica de supervivencia que obliga a desconfiar de las intenciones del prójimo.

Acepto mi culpabilidad por analizar las situaciones, los procesos,  las relaciones, los sistemas, por elaborar mis propias ideas y conclusiones. Más aún, por expresarlas sin pelos en la lengua, revolcándome en el fango de la fe ciega en que mis interlocutores compartirán el placer de pensar, evaluar, revisar, experimentar, mejorar, crecer.

Admito mi desconocimiento de la ley de la selva, de la competitividad constante, aún sabiendo que eso no me exime de su cumplimiento.

Hago apología militante en favor de los procesos educativos, del trabajar con personas contagiando el razonamiento y la interiorización consciente del por qué de las cosas. Combato el castigo como exclusiva herramienta educativa, la autoridad bajo amenaza, el respeto por temor.

Soy manifiestamente responsable de creer en la capacidad creativa de todas las personas, en la obligación de escucharlas, por mucho que al final alguien deba tomar una decisión y asumir la responsabilidad.

Aunque, advierto, delinquir no es un placer y tiene penosas consecuencias.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

en silencio



Llegó despacio y en silencio.

No hizo falta abrir, ni siquiera tocó a la puerta.

Se fue colando sin hacer ruido. Sin empujones.
Por las rendijas se asoma, saluda la mañana.
Con conversaciones reposadas me acompaña de madrugada.

No sé cómo ocurrió.
Cuando vine a darme cuenta, su mirada, su sonrisa... habitaban en mis días.



martes, 23 de noviembre de 2010

veces


A veces reboso energía
salpico ilusiones
contagio fe en las bondades ajenas.

Otras, me pesa la desconfianza
arrastro los pies entre desperdicios putrefactos
me revuelco por el dolor de las muchas puñaladas
acumulo el agotamiento por tanta batalla inútil.

Es por eso que algunos días salto y río a carcajadas
mientras que otros callo y, mejor, me abstengo.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Una de Robin Hood

potaje




















Cada semana utilizaba los mismos ingredientes: lentejas, calabaza, zanahoria, habichuelas, papas, agua, ajos, cebolla, un puñado de sal y un chorrito de aceite.

Los vertía en el caldero siempre por el mismo orden, dejándolos cocer el mismo tiempo, a la misma temperatura.

Pero no siempre obtenía el mismo potaje.

viernes, 19 de noviembre de 2010

padres




















Hay padres que abrazan
y padres de hielo.

Padres cartera
padres reprimenda
padres si te he visto no me acuerdo.

Los hay invisibles,
hombres que huyen
de hormigón
que no lloran
que no expresan.

Están los padres que comunican
fuera de cobertura
ahora no puedo
siempre trabajando.

Hay modelos
personajes de referencia
que invitan a seguir sus huellas
y padres que marcan el camino sin derecho a discusión.

A quienes los difuminó la ausencia,
hasta convertirlos en superhéroes.

Padres que gritan
padres de silencio
padres boomerang
padres ecos.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

madres


















Hay madres que abrazan
y madres que ahogan.

Madres que corren para salvar a sus crías
y quienes las abandonan.

Madres que no paran de hablar
las que lo dicen todo sin palabras
quienes prefieren callar.

Hay madres cenicientas
madrastras malvadas
y wendis soñadoras, ésas que huyen tras cualquier peterpan.

Madres taladro
madres panfleto
madres ombligo

Madres cálidas, como arena
Madres moldeables, como arena
Madres que se pierden entre los dedos, como arena
Madres que se pegan a la piel, como arena.

martes, 9 de noviembre de 2010

deseos -1


Un día decidió comerse todas sus ranas. Convertirse en su propio comesueños.

Y no lo hizo por glotón, no. 

Ocurrió que estaba harto de vivir esclavizado a los deseos, por mucho que fueran suyos, inculcados, mediatizados, prestados o plagiados.

Prefirió vivir la vida tal y como venía. Sin más.

Una decisión arriesgada, le dijeron.
Aunque lo cierto es que ahora no tiene mal aspecto.
Hasta parece feliz.

lunes, 8 de noviembre de 2010

Días de balas y sangre


La memoria histórica no es sólo la guerra civil española y el franquismo. La venta del Sahara también tiene que ser subsanada. Ahora no se puede ser equidistante.

martes, 2 de noviembre de 2010

deseos 2


Le preguntó si quería ser su oso de peluche.

Sin dudarlo, rebosante de ilusión, contestó con un rotundo sí.

Fue entonces cuando le dio un abrazo hasta la asfixia, 
le sacó los botones de los ojos
y le giró la cabeza hasta arrancarla, 
mientras le clavaba los dientes en frenéticos mordiscos.


deseos 1





Besó una rana,
por probar...


























...y se convirtió en cucaracha.


jueves, 28 de octubre de 2010

estilos

No sé si por inseguridad o por ideología, abunda la creencia, aún en nuestros días, en la autoridad como modelo educativo. Domesticar bajo amenaza, bajo la coacción constante del castigo. El conductismo puro y duro del refuerzo negativo y el positivo cuando yo, quien tiene el poder, considero que lo mereces.

No es una cuestión ideológica, sino pragmática. Cuando el educando se aleja o advierte que el presunto educador-castigador no está en su radio de acción, desarrollará todas las conductas prohibidas a modo de catarsis.

Si no se entrena en el libre razonamiento, en la negociación, en el respeto a las opiniones de los otros por mucho que se alejen de las mías, en la búsqueda y aceptación de tratos justos, equilibrados, en la defensa pacífica de las ideas, en la denuncia razonada de las injusticias y abusos… Si no hacemos esa dura tarea, no servirá de nada.

Y claro que la segunda opción es más jodida. En la primera, con unos cuantos castigos consecutivos, amenazas de más y peores… y, ¡zás!, tenemos a la parroquia presuntamente domesticada. Bueno, asustada, buscando la oportunidad para darnos esquinazo y seguir haciendo lo que le apetece, pues no le hemos ayudado a entender, mucho menos a interiorizar, el por qué de lo que le pedimos, exigimos.

Educar en la negociación implica el arduo trabajo de convencer, de ganarse el respeto con argumentos y coherencia. Por supuesto que los resultados son lentos y no siempre se alcanzan. Con la opción de la mera disciplina, en el mejor de los casos, se reprograman borregos.

Lo curioso de todo esto, iluso de mí, es que daba este dilema por zanjado hace décadas y, de pronto, me veo envuelto en este seudodebate con jóvenes en posiciones que me recuerdan a las de quienes estaban a punto de jubilarse cuando me incorporé a este oficio la primera vez, poquito después de la Transición.

Sahara asediado

miércoles, 27 de octubre de 2010

noche de hotel

No sé con qué soñaba en aquellas primeras horas de descanso nocturno, sólo tengo constancia de haberme despertado de pronto. Todo estaba muy oscuro, apenas entraba luz por la puerta de la terraza. Fue por eso que me ocupó unos segundos reconocer que se trataba de la habitación de aquel hotel. Un instante más tarde identifiqué el sonido que me sobresaltó.

No entendí el idioma. De algún país del este de Europa, quizás. Daba igual. Las entonaciones no dejaban dudas sobre lo que estaba ocurriendo

¿Escuchas?, pregunté. “Sí, los oigo desde hace un rato”, dijo Ana.

Un varón vociferaba enfadado, con tono de reprimenda. Su discurso se salpicaba de golpes, ¿contra las paredes?, de muebles arrastrados, de miedo... Él gritaba enloquecido, con esa voz quejumbrosa del animal herido que arrasa ciego contra todo lo que se le ponga por delante.

A ella apenas se le escuchó en una o dos ocasiones. Se defendía con gritos de rabia, aunque algo dejaba intuir que no era ésta la primera función a la que acudía, que ya sabía de los espectáculos de su acompañante.

Descolgué el teléfono e informé a recepción de lo que estábamos siendo testigos. Unos minutos después volvió el silencio a aquel edificio del centro de Madrid. En nuestras cabezas, los gritos de esa madrugada siguieron retumbando, construyendo escenas y argumentos.

martes, 26 de octubre de 2010

amador


En Amador, Fernando León de Aranoa (Familia, Barrio, Princesas, Los lunes al sol...) sigue fiel a sí mismo. Imposible de etiquetar, eso que tanto gusta a los críticos, evita moverse por estructuras prefijadas, manteniendo la capacidad de sorprender hasta el último fotograma.

El sello de Aranoa se descubre en la crítica social, en su realismo y contemporaneidad, en los momentos trágicos que conviven con los cómicos y, de modo genial, en sus diálogos, circulares, absurdos, en los que cada personaje habla de algo diferente, alguno se aventura con la metafísica o vomita sentencias desgarradoras. Una huella del escritor de relatos que también es.



Sin ánimo de fastidiarle la peli a quien no la haya visto, ahí van algunas de sus perlas:

Amador: "La vida es como los rompecabezas. Nacemos con las piezas y todo consiste en irlas colocando bien."
Marcela: "Pues a mí no me dieron ninguna pieza."

Marcela: "Te sientes sola. Te metes en una relación porque no quieres estar sola, pero sigues sintiéndote sola."

Marcela: "Cuando todo es silencio es cuando mejor se escucha. Cuando la tierra te atrapa por las piernas y los brazos es cuando de verdad bailas."

Marcela: "Como las flores, hay personas que siguen siendo útiles después de la muerte."


aisla2



La isla que me aísla
me abre las puertas del océano.

lunes, 25 de octubre de 2010

al otro lado del consumismo tecnológico



Y seguimos empeñados en buscar la felicidad coleccionando electrodomésticos. Así nos va.

Claro que, nos guste o no, tod@s estamos viendo este vídeo tan interesante desde nuestros respectivos ordenadores. La vida, que es así de dialéctica y contradictoria.

jueves, 21 de octubre de 2010

en cualquier papel


Tengo especial debilidad por los periódicos y revistas manufacturadas, ésas que hacen cuatro amigos con mucha ilusión, algunas ideas y apenas medios. Desde que tengo memoria me embarco en esos microproyectos seudoeditoriales y, por supuesto, cada vez que cae en mis manos algún ejemplar del género lo devoro con complicidad.

Hoy me crucé con varios números de una revista hecha por chicos en un centro de internamiento de medidas judiciales. Como no podía ser menos, los escudriñé desde la portada hasta la última. Desde uno de aquellos folios fotocopiados, me llamó un texto titulado "Vivir como flores" o algo así. Conociendo la procedencia de la edición, me picó la curiosidad. Venía a contar, con estilo pretendidamente oriental, cómo un maestro adoctrinaba a sus discípulos para que vivieran de ese modo. La cosa, explicaba, consiste en ser capaces de sacar lo bueno que haya en el estiércol, como hacen las plantas con sus raíces, al tiempo que regalamos al ambiente el mejor de nuestros aromas.

Como moraleja, el texto concluye diciendo que es justo preocuparse por las propias culpas, pero no es sabio permitir que los vicios y fallos de los demás te angustien y te incomoden.

Es más que probable que era eso lo que yo necesitaba leer en estos días, la lección que debía aprender de lo vivido estas semanas. Lo que no sospechaba era dónde iba a encontrarla.

lunes, 18 de octubre de 2010

streeper

Muchacha desnuda riendo (1963). Óleo sobre lienzo. 34x28 cm. Lucian Freud.

Y sus burdos ataques le dejaron la estupidez al desnudo.

viernes, 15 de octubre de 2010

agua

Los blogueros del mundo se han unido para realizar una acción global y escribir hoy  sobre el agua. Me parece una idea genial. Claro que, como nunca me gustó escribir por encargo, al ponerme a la tarea me encuentro espeso, falto de ideas, de originalidad para no correr el riesgo de repetirme entre tanto oráculo de la Red, a quienes, sinceramente, procuro no visitar ni, mucho menos, leer, no sea que me dé por plagiarlos o contaminarme.

Haré el esfuerzo porque la idea es buena, especialmente por la temática. Hartos estamos de escuchar bocas llenas de grandes palabras en pro de la generalización de la educación como motor de desarrollo. La educación y la cultura occidental, a ésa se refieren, por supuesto, lo que no deja de ser otra versión más del viejo colonialismo por mucho que se disfrace de altruista.


Y digo que me gusta que hablemos del agua porque no se puede reconstruir un país, un pueblo, una familia, si se está muriendo de sed y de hambre. De qué sirve la cultura en un cuerpo deshidratado, en un cuerpo desnutrido.

Lamentable, pero cierto: en pleno siglo XXI millones de personas mueren por carecer de estos recursos tan elementales o, en el mejor de los casos, deben recorrer kilómetros y colas interminables para conseguir unos litros de agua. Sí, de la misma que en la otra parte del Planeta dejamos correr descuidados por nuestros grifos abiertos mientras fregamos, duchamos, lavamos nuestros coches, celebramos fiestas presuntamente ancestrales... y mil chorradas más.

Pues vaya. Para no tener qué escribir, creo que me he echado unas cuantas líneas. Ya lo comentaba ayer: Tengo que aprender a guardar silencio ¡Buf, cuánto me cuesta!

miércoles, 13 de octubre de 2010

trinchera


Redujo el universo al tamaño de su cerebro, dejando una minúscula puerta de acceso, a la medida de su estrecha silueta.

Invirtió sus días en cazar sombras y ecos, todo aquello que no cabía por su entendimiento.

Hizo de su vida una trinchera, desde la que disparar a lo diferente, que tanto la amenazaba.

jueves, 7 de octubre de 2010

cambio de caracola

 

Cambiar de caracola tiene mucho de renovación, también de desorientación y salto al vacío.

Se tarda un tiempo en descubrir qué personaje duerme al otro lado de la pared, ésa sobre la que ahora reposa el cabezal de mi cama; en saber a quién molestan mis pisadas, de dónde vienen los ruidos o a qué volumen puedo escuchar la música y seguir pasando desapercibido.

Por ahora, sólo unos saludos a desconocidos mientras invado el pasillo y bloqueo el ascensor con mis pertenencias, con buena parte de mi intimidad aireándose por las ranuras de cajas y bolsos. Fragmentos de mi biografía que miran de reojo esos extraños que suben y bajan, como queriendo escudriñar el imaginario del nuevo habitante del gran caparazón que  ahora compartimos.

lunes, 27 de septiembre de 2010

la encontré


La busqué entre las olas
Y saboreé la calma de flotar bordeando su vaivén
Y disfruté dando giros ingrávidos bajo sus aguas
Y me dejé cosquillear entre sus burbujas